domingo, 30 de octubre de 2011

Cap. 29 de "Obsesionados con el sexo"

ADVERTENCIA: Echadle imaginación... xDD



CAPÍTULO 29: Viejos sentimientos y nuevas esperanzas






Los días continuaron pasando uno tras otro sin mejora ninguna.

James seguía sintiéndose tan culpable como aquel día que cayó ante Frank y por eso centraba todos sus esfuerzos y atenciones en conseguir que lo suyo con el pelirrojo funcionase.
Pero eso no podía cambiar los sentimientos que dicho pelirrojo tenía.

Frank... Frank cada día estaba más metido en las drogas y lo único que estaba consiguiendo era que sus amigos se alejasen de él. Todo lo que hablaban con él era con respecto a la banda y, si en alguna ocasión hablaban de algo que estuviese fuera de ese tema, por una u otra cosa terminaban a gritos y en alguna ocasión, a golpes.
Así que para evitar eso, evitaban también a Iero todo lo que podían.

Gerard seguía de gira con LeATHERMOUTH y seguía siendo la pareja de James como si no supiese nada de lo que había pasado. Además, al ver todos los intentos de Reggie por hacer funcionar su relación y saber que nunca más había estado con Frank, le hacían poner todo lo posible de su parte para contribuir a ese triunfo.

Pero no podía.

Quería mucho a James. Muchísimo. Pero no había ni un solo sentimiento hacia él que tuviese relación con el amor. No, lo suyo era cariño, agradecimiento por todo lo que hacía por él, ternura hacia sus palabras y caricias. El amor seguía sin tener hueco en esa pareja.

En cambio, no podía evitar mirar a Frank en cada mínima ocasión. Verle recién levantado, aún con cara de sueño, observar su cara de concentración cuando componía algo nuevo, verle practicar con su amada guitarra como muchos años antes le había visto... O quedarse totalmente atontado cuando Frank salía del baño con una toalla atada a la cintura que dejaba ver los nuevos tatuajes que llenaban ahora su cuerpo.
Pero, igual que disfrutaba de esos momentos, también tenía que aguantar que Iero hablase de Jamia, que se besasen y magreasen delante de él.

Pero para el pelirrojo eso no era lo peor. Lo peor era ver a Frank destrozándose poco a poco, drogándose cada vez más a menudo y mezclando su amada cocaína con incontables litros de alcohol.

Eso sí que le dolía, más que las malas palabras o los golpes que habían intercambiado esas otras veces.

...


Era de noche y acababan de terminar un concierto que había superado con creces a todos los dados hasta ese momento, por lo que todos estaban que no cabían en sí de felicidad. Incluso Gerard estaba contento por James y los otros chicos de la banda con los que había hecho muy buenas amistades.
Así que, para celebrarlo, decidieron que harían una fiesta a la que invitarían a otros grupos que habían tocado en ese festival.

El alcohol, el tabaco y la droga corría de mano en mano en la explanada del recinto donde estaban aparcados los autobuses.
Gerard llevaba unas cuantas copas de más y hacía un buen rato que había perdido a James entre la cantidad de gente que había allí.

Por su parte, Frank estaba casi en las mismas condiciones, solo que le había sumado un poco de droga. Poca, comparada con otras veces. Y estaba más que entretenido hablando con un tal Syn, un miembro de otra banda.

Todo iba bien hasta que comenzó a insinuársele, siendo la respuesta inmediata del más alto un puñetazo en el ojo que le dejó sentado en el suelo.

Gerard, que había visto lo sucedido, con sus facultades mentales perjudicadas por todo lo ingerido, corrió hasta donde había caído y se arrodilló para ayudarle.

Si no podía ayudarle a salir de las drogas, al menos podía ayudarle con lo demás...

Frank estaba que echaba humo por las orejas, con los ojos cerrados con fuerza maldiciendo al pelinegro que le había pegado, por lo que no se dio cuenta de quién le ayudaba a levantarse hasta que no abrió los ojos una vez de pie.

Entonces, sus miradas conectaron como hacía mucho tiempo que no hacían, sin esa hostilidad tan común en los últimos meses de convivencia.

Se quedaron en silencio unos minutos, hasta que Gerard le propuso a Frank ir al autobús a por un poco de hielo para ponérselo en el ojo golpeado.

Frank aceptó y caminaron hasta el bus. Pero cuando llegaron a este y Gerard se acercó a las escalerillas para subir, Frank le agarró del brazo y le acorraló se espaldas a la pared, colocando sus brazos a ambos lados del cuello del mayor para impedirle escapar.

Estaban a milímetros de distancia, casi podían sentir el latir del corazón contrario y sus alientos con sabor a alcohol chocaban entre medias.
Y sin decir ni una palabra, Frank atacó esa boca que hacía tanto tiempo que no probaba y que, aunque en un estado de consciencia absoluta nunca lo aceptaría, tanto había echado de menos.

G- Frank, ¿qué haces? -Preguntó separándole un poco sujetándole de la camiseta.

F- Pues hasta que has decidido hablar, besarte. -Respondió con obviedad y el entrecejo fruncido.

G- Sí, eso lo sé. Pero, ¿por qué? Me llevas jodiendo desde que volví y ahora me besas...

F- ¿En serio quieres hablar de eso ahora? -Resopló y Gerard asintió con la cabeza- Joder... Te echo de menos, ¿vale? Mi cuerpo echa de menos el tuyo y no me atrevería a decirte esto si no estuviésemos los dos borrachos, porque ahora tengo una excusa. Además, -Añadió, rompiendo el encanto- estoy caliente. -Se restregó un poco contra él.

Todas esas palabras se arremolinaban en la cabeza del pelirrojo y no terminaba de entender lo que oía.
Pero le daba igual, porque en ese momento él deseaba eso tanto con Frank, así que decidió dejar la discusión para otro momento (si es que al día siguiente recordaban algo de lo que había pasado) y tirando de su camiseta, volvió a juntar sus labios con los del más bajito.

Se enredaron en un beso húmedo donde reconocieron y saboreaban esa boca que tanto tiempo habían pasado sin degustar, además de dejar al aire sentimientos que habían permanecido escondidos dentro de cada uno.

Sin saber cómo, terminaron en la litera de Frank. Suerte que nadie más estaba dentro del autobús.

Los movimientos dentro de esa litera eran bruscos, necesitados y desesperados. Después de más de 3 años, por fin tenían ese cuerpo que tanto habían extrañado junto al suyo.

La ropa desapareció en un abrir y cerrar de ojos mientras los chicos se movían en ese minúsculo espacio, recorriendo el cuerpo contrario con cuidado, ternura y ganas, muchas ganas.

Gemidos, jadeos y gritos llenaban el ambiente, con tal volumen que, si no fuese por la música de fuera, todos los podrían haber escuchado.

Gerard echaba tanto de menos tener a Frank junto a él, extasiado y rogando por más contacto como estaba en ese mismo momento, cuando se dedicaba a acariciarle el glande suavemente con el pulgar, cuando le masturbaba a una velocidad tan lenta que se le hacía casi matadora y, sobre todo, cuando entraba en él poco a poco y empezaba a moverse despacio, saliendo por completo y volviendo a entrar hasta el fondo.

Suspiros, embestidas, besos, gemidos, entradas más fuertes, mordiscos. Frank pidiendo más.

F- Aw, Gee, ¡más rápido! Joder, dame más fuerte. ¡Párteme!

Way sentía que se corría cada vez que una palabra obscena o una petición del estilo salía de su boca y lo único que podía hacer era cumplir sus órdenes, más velocidad y más fuerza, sintiendo el golpeteo de sus pelotas contra el firme trasero de Frank.

Pero no podía acabar tan pronto. Llevaba demasiado tiempo esperando eso como para echar la oportunidad corriéndose antes de tiempo.

Los movimientos se hicieron frenéticos y duros mientras los dos cuerpos se movían coordinados, golpeando en ocasiones las paredes que les rodeaban.

Cinco, seis, siete minutos más y Frank había terminado en su mano, contrayendo todo su cuerpo y logrando que Gerard acabase justo unos segundos después sin poder retrasarlo más.

F- Ahhh, sí, Gee... Justo a-ahí. Ahh joder... Te amo. -Había murmurado en un descuido justo antes de correrse.

Gerard le escuchó débilmente pero creyó que había sido cosa de su imaginación, como tantas otras veces. Aún así, su borrachera desapareció de golpe y fue entonces cuando terminó, con los ojos fijos en el rostro del Iero, que tenía los suyos cerrados.

El pelirrojo cayó exhausto sobre el cuerpo contrario, aún tembloroso por el orgasmo y escondió su cara en su cuello, dejando ahí un último beso.

Cuando Frank recuperó la conciencia después de todas esas sensaciones que no había sentido desde 3 años antes y el alcohol dejó de afectarle, se dio cuenta de lo que acababa de decir y no pudo más que arrepentirse, rezando porque Way no le hubiese escuchado en su momento de debilidad.

F- Vete a tu cama, Gerard. -Ordenó en tono seco y cortante. El aludido miró a Frank, quien centraba sus ojos en el techo, evitándole- Bájate.- Y esta vez acompañó sus palabras de acciones y le empujó “sutilmente”.

Gerard, sin decir nada, se levantó, recogiendo su ropa de esa litera y tirándola al suelo antes de meterse en su litera.

Sabía que ese momento con Frank no duraría eternamente, pero había valido la pena.

Además, estaba casi seguro que no se había imaginado que esas dos palabras salían de la boca de Frank, lo cual era una buena noticia que alimentaba la poca esperanza que le quedaba.

Pensando en todo lo que había ocurrido, cayó en un feliz sueño, mientras en la cama de arriba, Frank dejaba escapar un par de lágrimas, sin querer admitir que eran producto de no haber escuchado la misma respuesta por parte del otro.








Continuará...




____________




¡FRERARD!


¿Qué os ha parecido?
¿Qué ocurrirá después de ese "te amo" que se le ha escapado al enano?
¿Cómo terminará Frank con las drogas?


Comentad, por favor ^^

5 comentarios:

  1. madre miaaaaaaaaaaaa
    al final el enano tambn keria un te amo por parte de gee :) claramente acabaran juntos! por dios y por favorrr jajajaj gee tambn le ama, asi k, dos mas dos son cuatro;) y espero k ayuden a frank con lo de lñas drogas... en seiro necesita salir de esa espiral de mierda ¬¬
    y espero k el lerdo de gee le diga tambn te amo pronto!! wiii k felicidad k stan again juntos jajajaj venga, azlos felices:) pasa de deewes, k se joda jajaj

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  2. ME ENCANTAAAAA Sabia que algun mmento volverian aunque fuera u minutillo ¡¡waow!! ha estado genial enserio :). Y respecto a las drogas, por mi, que las deje...

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  3. ¿Me puedo morir? Ains, que ternuris, esos dos son un par de... saksajkasjsaksaas♥ *-*

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  4. EJFSHKLJHDFKNJSFNJKSNJKFSDF
    DIOS MÍO :'D
    ME ENCANTA, ME ENCANTA, ME ENCANTA.
    Y el final, cuando Frank le dice 'Te amo'...
    Ay, qué bonito :'D
    Me voy a poner como las viejas con la telenovela, en serio xDDDDDDD *-*
    Es genial. Mucho.
    Lo que podía haber hecho Gerard es contestarle a ese te amo, pero claro, pensaba que había sido su imaginación... u_u
    Aaaaw, sube pronto :)
    #Att: Jones Armstrong

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  5. Awwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwww.
    Este capítulo es muy GRRRRRRRRRRR, pero tiene un puntito romántico que me encanta *-*
    Me da penita de Gee por lo malo que ha sido Frank con él al acabar, y me da penita de Iero porque sé que quiere a Gerard y no es capaz de admitirlo D:
    Ese te amo era sincero, el enano lo sabe y Gerard sabe que no ha sido producto de su imaginación. No entiendo a Frankie, de verdad u.u Tiene la cabeza echa un lío.
    A todas estas, el pobre James T.T Él quiere a Gee pero tiene que darse cuenta de que no han nacido para estar juntos...
    Syn GSSAFJDDSLKFSAGJJJJJLSFAKGDF. Me corro con ese hombre u.u
    Por cierto, me ha encantado cómo has descrito lo que sentían Gee y Frank, y cómo se echaban de menos y todo eso... Ha sido muy poético *-*
    Y bueno, que me ha encantado, que quiero que lo sigas para ver qué hace Frank y que lo saques de las putas drogas >.<

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